Detrás de las infecciones: un nanomundo

La Dra. Alicia Farinati, Titular de la cátedra de Microbiología de la Facultad de Medicina, publicó un libro sobre “Detrás de las infecciones: un nanomundo” (Editorial Ascune) con jóvenes colaboradores jóvenes de la cátedra; basado en prototipos, trata de poner al alcance el conocimiento de la interacción de las bacterias con nuestras células.  En un futuro cercano esto permitirá recurrir a otras estrategias terapéuticas o preventivas

Los microorganismos forman parte de nuestra vida. Su actividad es importante tanto en salud como en enfermedad. Para ello se ponen en contacto con las células a través de receptores que poseen y estructuras especiales. Ello permite que colonicen o produzcan infecciones. La interacción suele ser compleja. Si esta se interrumpe los microorganismos, dentro de los cuales están las bacterias, no pueden establecerse, no colonizan, pero tampoco pueden desarrollar su patogenicidad. 

Conocer el modo de comunicación nos proporciona una herramienta para combatir muchas de las infecciones que producen o elaborar vacunas que impidan su aparición. Esto es aún más importante ya que la resistencia que presentan las bacterias frente a los antimicrobianos convencionales es global y amenaza con dejarnos sin recursos para luchar con ciertas enfermedades infecciosas.

El libro pretende aclarar los mecanismos que intervienen en la producción de las infecciones y síndromes relacionados con los microorganismos. Todos sabemos que estos pueden provenir de nuestro microbioma o formar parte de ese gran grupo de microorganismos ambientales que disponen de ingenio y herramientas adecuadas para provocar daño al ser humano. Suele decirse la clínica es soberana, pero ¿qué hay detrás de ese signo, de ese síntoma, de ese síndrome que debe ser correctamente interpretado para poder efectuar un diagnóstico y una terapia exitosa? Existen numerosos mecanismos, algunos de los cuales no han sido aún dilucidados. Cuando tratamos con los procesos moleculares todo parece complejo. Sin embargo, esos procesos son los que explican lo que vemos, sentimos y procuramos eliminar, los signos y síntomas de las infecciones. Obviamente el conocerlos nos ayudará a dilucidar cómo puede evolucionar una infección, sea favorable o desfavorablemente. 

También podremos investigar vías terapéuticas sustentables que hoy, en su mayoría, pasan por el uso de antimicrobianos tradicionales. Por eso parece no sólo útil, si no también necesario conocer lo que podríamos llamar la intimidad de las infecciones. Así durante la lectura van apareciendo genes que codifican numerosas enzimas, estructuras que permiten acelerar o retrasar actividades metabólicas, otras capaces de dañar las membranas celulares del huésped, o que paralizan la síntesis de proteínas necesarias para la vida celular. 

Evidentemente existen estrategias que nos asombran. Además, veremos que en ese nanomundo existen los algoritmos que hoy dominan la inteligencia artificial. Las bacterias en su encuentro con las células desarrollan caminos complejos para llegar a la meta benéfica o lesiva. No nos olvidemos que muchas de las actividades bacterianas sirven como modelos biológicos. 

Ojalá que los estudiantes, los profesionales y todos aquellos que aspiren a un mundo mejor, sepan encontrar en este humilde tratado, alguna inspiración para lograrlo y se traduzca en inquietudes para resolver los problemas que nos desafían a diario. Está en cada uno la voluntad y el empeño para hacerlo. Detrás de la clínica hay todo un mundo que tratamos de descubrir. Es como un teatro donde la escena se puede ver, pero no lo que transcurre entre bambalinas. A pesar de y con el conocimiento de lo que la realidad virtual representa como avanzada en la educación, que proporciona una experiencia integral y sensible, todavía creemos en el valor de la palabra escrita en papel. Por eso los libros seguirán vigentes y coexistirán con otras herramientas educativas. ¡Vamos, los invito a sumarse a ese nano-mundo fascinante!

Prof..Dra. Alicia Farinati