“Hoy es un día de celebración por el logro obtenido, producto de su esfuerzo, perseverancia, decisión y fortaleza”

En el Auditorio de la Facultad de Medicina, se realizó la Colación de Grado de la Facultad de Ciencias Jurídicas, que representa el acontecimiento por excelencia de la Vida Universitaria.

Presidió el acto académico la Señora Decana Mg. Livia Mercedes Uriol; la acompañaron en el estrado, la Señora Directora del Programa Franco-argentino, Mg. Martina Lourdes Rojo y la Señora Prosecretaria Académica Abogada Especialista, Eleonora Cano.

Se encontraban presentes la Profesora de Derecho Constitucional e Instituciones de Derecho I y miembro del Consejo Superior de la Facultad, Abog. Andrea Karina Schvindtt, el Profesor de Derecho Aeronáutico Dr. Hernán Adrián Gómez, la Profesora de Economía Política y de Economía y Derecho Económico, Mg. Lourdes Lucero, el Profesor de Bioética, Instituciones de Derecho Privado y Derecho Civil V, Mg. Matías Tonon y la Profesora Abog. y Colaboradora Académica Romina Roberto.

Para dar inicio a la celebración se presentó el Quinteto de Vientos de la Orquesta Sinfónica de la USAL.

A continuación, se recibieron a las banderas de ceremonia. Abanderado de la Enseña Nacional: Mateo Benincasa, escoltas de la misma, Antonella Smaldoni y Rodrigo Martín Vergara Domínguez.  Abanderada de la Enseña Papal, Lucia Noemi Portela y escoltas de la misma, Micaela Ivana Cappella e Ignacio Luis Fusco. Luego se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino.

Seguidamente, el R.P. Andrés Tocalini procedió a la bendición de los títulos y medallas.  

Posteriormente, en nombre propio y en el de sus pares, habló en representación de los graduados el Abogado Agustín Hernán Ferretti: “Señora Decana Magister Livia Mercedes Uriol, Señora Directora del Programa Franco-argentino Mg. Martina Lourdes Rojo, Señora Prosecretaria Académica Abogada Especialista Eleonora Cano. Autoridades, graduados y querida familia de la Universidad del Salvador, buenas tardes.

Buen día y bienvenidos. Quiero comenzar el discurso expresando que hoy no es un día cualquiera en la vida de los aquí presentes. Este día se distingue porque ya dejamos de ser estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad del Salvador, y la sociedad entera nos está recibiendo como abogados. Ya ostentamos la calidad de profesionales del derecho y como tales en nuestro rol gozamos de las aptitudes para poder abogar por los derechos de aquellos que acudan a nuestra puerta, o ejercer quizás funciones públicas tales como las judiciales en el ámbito litigioso o las notariales en lo alitigioso, o así también elegir el camino de la ciencia y la investigación y consecuentemente buscar transmitir los conocimientos por doctrina o docencia. Ya no solo debemos vivir el derecho como un medio de vida sino como un modo de vida que persigue la eliminación de lo injusto en cada rincón a lo largo y ancho de nuestro país. 

Es un profundo honor y una gran responsabilidad dirigirme a todo el auditorio en este momento tan especial de recibimiento de los títulos profesionales que consagran y dan culminación a un camino que en mi caso comenzó allá por el comienzo del año 2018. Se cierra una etapa llena de emociones. Algunas buenas como la gratificación de obtener una nota alta después de largas horas de estudio sentado en una silla, como la alegría cuando nos tocaba promocionar, o como el interés que se despertaba al conocer un fallo o algún tema en puntual que nos hacía leer y releer el tema. También otras malas como la intranquilidad la noche anterior a rendir o la frustración al darnos cuenta que no sabíamos tanto como pensábamos. Se cierra una etapa de conocimientos, en donde no solo aprendimos saberes y nutrimos nuestra mente, sino que también aprendimos a conocernos a nosotros mismos, a pensar antes de responder y a conocer a nuestros compañeros, los cuales hoy en día ya son amigos o colegas. 

Nuestra Constitución Nacional, en su parte dogmática, especialmente en su artículo 14 garantiza los derechos de enseñar y de aprender. Dos pilares fundamentales en la vida democrática y humana. Los abogados somos esa herramienta que existe para que aquellos que no pudieron acudir a una universidad para poder hacer valer sus derechos, vivan en una sociedad con principios más justos, pues los abogados somos auxiliares de la justicia y por lo tanto tenemos el deber de defender nuestra Carta Magna. Si bien hoy en día nada es fácil, la gratificación de una mano fraterna en señal de agradecimiento motiva e impulsa hacia el futuro. Es necesario destacar como la Universidad del Salvador, desde el primer día, busca acobijar a sus estudiantes y hacer que el edificio de Callao 660 sea una segunda casa en nuestras vidas, dejar el secundario y comenzar en la vida universitaria es una transición que gracias a los “buenos días” de las personas de seguridad y mantenimiento, a los  “como estas, como te fue” de las personas de administración y a la destacable profesionalidad de los docentes hacen que este cambio sea más fácil y menos abrupto. 

Graduados, es imprescindible felicitarnos y recordarnos día tras día que el título de abogado es el piso y no el techo.  Cabe a su vez, felicitar a todos nuestros familiares, incluso los que no se encuentren aquí presentes ya que en mayor o menor medida nos impulsaron y ayudaron a estar donde nos encontramos, y hoy en día, reciben a un nuevo abogado a la familia. Es menester destacar la labor de los docentes de la Universidad del Salvador quienes clase tras clase siempre instaron en brindarnos conocimientos con exactitud y experiencias con pasión. Por último, me permito hacer una mención especial a los mejores padres que me pudieron haber tocado a quienes les agradezco su amor y su transmisión de valores y conocimientos. 

Muchas gracias a todos por estar acá. Les deseo a los graduados una buena carrera profesional, una buena vida, y recuerden que un derecho no es lo que nos deben dar, un derecho es lo que nadie nos debe negar”.

Seguidamente, hizo uso de la palabra la Decana de la Facultad, Mg. Livia Mercedes Uriol. A continuación, transcribimos algunos párrafos de la alocución: “Es un honor y un privilegio para mí dirigirme a ustedes. El Acto de Colación es un acto solemne, que marca la culminación de la Carrera, sea de pre grado, grado o de posgrado. Es un hito trascendente y emotivo en sus vidas. Implica para la Universidad la presentación en sociedad, de los nuevos Profesionales de la Facultad de Ciencias Jurídicas.

Cada uno de ustedes podrá voltear la mirada hacia el momento de la decisión, hacia el primer día de clase, seguramente un día con más nervios e incertidumbre que con certezas, recordar a los compañeros que compartieron con ustedes el camino, posiblemente muchos de ellos con el tiempo se convirtieron en amigos, a los docentes, el primer examen final y el tan ansiado último examen final, momentos brillantes, algunos oscuros y la mayoría, los momentos grises del largo tiempo de estudios. Los profesores pueden ver aquí la cosecha y sentir que han colaborado en la transmisión del saber.

Hoy es un día de celebración por el logro obtenido, producto de su esfuerzo, perseverancia, decisión y fortaleza.  El título profesional es una herramienta para insertarse en la comunidad y cumplir con eficiencia el papel que decidan asumir. Pero de nada vale éste logro académico si no se le incorporan la formación integral como persona, el compromiso social y ético para con los demás; y, en estos tiempos, la flexibilidad, la capacidad de adaptación a la realidad y actualización permanente.

Antes de terminar, quiero felicitar a las familias de los graduados, cada uno de Uds. ha sido factor para el éxito de ellos y sobre todo de acompañamiento reciproco en las difíciles circunstancias generadas por el contexto de pandemia.

Estimados graduados, sean verdaderos agentes de cambio desde donde les toque desempeñarse. Nunca dejen de luchar por sus ideales y sus derechos, sin olvidar cuales deben ser sus deberes.

Les deseo éxitos y que el país y el mundo se vea beneficiado por su hacer. Al finalizar esta ceremonia van a pasar a formar parte del claustro de los más de 71.000 graduados de la Universidad del Salvador que los preceden.

Sepan que las puertas de esta Casa, vuestra Casa, estarán siempre abiertas para ustedes. Que Dios los ilumine y los bendiga y San Ignacio los acompañe”.

Seguidamente, la Señora Decana Mg. Livia Mercedes Uriol tomó juramento a los graduados.