Compartiendo experiencia profesional

Catalina Mackinlay se graduó en 2014 de la Licenciatura en Ciencias Ambientales de la Universidad del Salvador (USAL). Es argentina, pero actualmente reside en Australia. Allí trabaja para una consultora ecológica dedicada al control de la biodiversidad, en una nación donde los seres vivos de los diferentes ecosistemas son considerablemente peculiares. De hecho, Oceanía se caracteriza por sus numerosos endemismos vegetales y animales, muy distintos a los de los demás continentes. Entre ellos, como es sabido, se destaca la variedad de mamíferos marsupiales, como canguros y koalas. 

El rol de esta joven investigadora formada en nuestras aulas se centra en el relevamiento, estudio y monitoreo de la flora y fauna afectada por el desarrollo de proyectos, principalmente del sector inmobiliario. Además, brinda orientación acerca de cómo los proponentes pueden evitar y minimizar los posibles impactos sobre las especies autóctonas. A través de una metodología específica, la consultora asigna “créditos de biodiversidad” como mecanismo de compensación, con el objetivo de lograr un estándar de "no pérdida neta" (no net loss) de diversidad biológica.

Anteriormente Catalina se especializó en nuestro país en evaluaciones de impacto ambiental y en estudios hidrogeológicos, y se desempeñó laboralmente tanto en el ámbito público como en el privado. Trabajó en la implementación de estrategias de sustentabilidad y la valorización de materiales dentro de la economía circular, aplicadas a diversos modelos de negocio. Antes de migrar a Australia cursó una Maestría en Gestión Ambiental en el ITBA y presentó una Tesis brillante sobre análisis de riesgos ambientales y de proyectos de integración urbana de asentamientos poblacionales informales en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. 

Desde hace varios años, Catalina participa como invitada a una clase durante el segundo cuatrimestre en la Sede Centro de la Universidad, en Ecología, una de las materias que dicto. Tuvo la gentileza de volver a la facultad hace pocos días en ocasión de una breve estadía en Buenos Aires por motivos familiares y, como siempre, compartió con los estudiantes de tercer año su experiencia profesional. Fue sumamente útil para mis alumnos conocer de “una par suya” las diversas oportunidades laborales que ofrece la carrera de la Licenciatura en Ciencias Ambientales de la USAL.

Por Irene Wais, Bióloga especializada en ecología, profesora universitaria de grado y posgrado.