Entrevista a Ignacio Bottaro: graduado en Periodismo
Ignacio Bottaro es graduado en Periodismo en la Facultad de Ciencias de la Educación y de la Comunicación Social y hoy desempeña su carrera profesional en el Grupo América, como cronista en BDA, el noticiero de Antonio Laje, y en Vivo el Domingo, conducido por Eduardo Battaglia. y ocupando la mesa en el estudio en diversos programas como “El Noti de A24” que conduce Paulo Vilouta o “Para que Sepas” de Edi Zunino. En diálogo con la Secretaría de Prensa, recordó su paso por nuestras aulas y contó su presente y futuro en la profesión.
“Afortunadamente siempre tuve una vocación enorme con el periodismo que se me presentó desde muy chico. Ya a los 14 escribía en revistas y sabía que ese era el camino que quería seguir”, expresó Bottaro. A su vez, recordó: “en el penúltimo año del Colegio Secundario tuve un profesor que me marcó en mi carrera que es Francisco Arri. Él siempre me aconsejó que siguiera la carrera universitaria en lugar de una terciaria y así fue que me incliné por la USAL. A “Pancho” lo tuve de profesor también en el último año del Secundario, en el segundo de la carrera y fue jurado en mi tesis final. En ese momento la USAL tenía un plan de estudios en donde casi todas las materias eran anuales lo que evidenciaba una exigencia total y debías mantener el ritmo para no perder el año. Así fue que decidí que era la mejor opción para formarme como profesional”.
Sobre su paso por la Facultad, Ignacio destacó que “el primer año de Facultad es una transición, le pasa a todos los estudiantes. Uno se embarca en una aventura y va llegando a puerto como puede. Aprendes semana a semana, te encontras con gente nueva y generas grupos de trabajo muy disímiles a lo que uno está acostumbrado”. Sobre sus expectativas al ingresar, dijo: “mi mayor expectativa era poder empezar a trabajar pronto en el medio periodístico lo que, afortunadamente, terminó ocurriendo. En mi primer año ingresé a trabajar en ESPN por lo que debí aprender a manejar los tiempos de cursada, trabajo y estudio, lo cual fue todo un desafío. Tuve profesores que comprendieron esa responsabilidad porque trabajaban o habían trabajado en medios, por lo que entendían lo que era estar en esa situación. Ya más adentrado en la carrera, uno también avanzaba en el trabajo y al empezar a conducir en ESPN Radio hubo herramientas que pude tomar de materias bien especificas en especial de tercer y cuarto año”.
“La carrera me enseñó, en primer lugar, a organizarme en los tiempos. Cursaba de 9 a 13, volvía a mi casa y a las 14 ya me iba al trabajo del cual volvía a la medianoche. Necesitaba una estructura tanto de horarios como de materias para poder mantenerme al día con la carrera. Mucho de mi aprendizaje fue compartido con mi experiencia laboral, es innegable. Sin una, no hubiera rendido tanto la otra”, explicó. Además, agregó: “constantemente iba aplicando mi conocimiento teórico en mi día a día laboral, así como la vida en una redacción me daba más herramientas para un debate más consistente en clase. Valoro muchísimo el contenido de materias como Régimen Jurídico de la Información, Expresión Periodística, Análisis Crítico de los Medios o Investigación Periodística porque fueron los primeros acercamientos concretos al trabajo específico que uno tiene en la práctica y que me aportaron conocimientos que al día de hoy sigo teniendo presente”.
Acerca de su recorrido académico y profesional, Bottaro aseguró que “el camino no es recto ni a veces te lleva a donde crees. Tenía dieciocho años cuando entré a trabajar en ESPN y pensé que mi carrera iba a ser allí. Pero no. En septiembre de 2018 cerró ESPN Radio, en donde conducía dos programas, y tuve que volver a empezar de cero. A los pocos meses ingresé al Grupo América como productor de videograph en A24. Pasé de tener mis programas todos los días a ser el productor de menor cargo, pero eso no me desmotivó. Al contrario, decidí destacarme y trabajar para volver a ocupar el lugar que deseaba. No fue fácil porque la televisión es completamente diferente a la radio. Las presiones, la responsabilidad y el estar en una señal de noticias es otra historia. En 2020 se abrió una posibilidad y tras varios reuniones, entrevistas y charlas, finalmente me dieron la chance de estar adelante de cámara. Desde ese día, seguí siempre al aire, afianzándome en varios programas tanto de América como A24. Hoy por hoy soy cronista del canal, trabajo en BDA, el noticiero de Antonio Laje, y en la continuidad informativa de A24”.
Sobre su paso en la Universidad, Ignacio recuerda una gran experiencia. “Es al día de hoy que me cruzo con algunos compañeros que he tenido que también se mantienen vinculados al periodismo. Me llevé el haber conocido a grandes profesores y la posibilidad de realizar una carrera que a nivel teórico me ha acompañado en mi tramo laboral”, señaló. Además, resaltó que “este año me tocó cubrir algunos móviles cerca de la esquina de Callao y Córdoba por lo que pude pasar a visitar a algunas de las autoridades que al día de hoy se mantienen en la Universidad como Érica Walter, Daniel Gutiérrez, Graciela Paredes y al propio Pancho Arri. Párrafo aparte a las chicas de Atención al Alumno que cada vez que me cruzan me reciben con una sonrisa y un “te miro todos los días en la tele” ¡lo cual me genera una vergüenza total!”.
En 2018 publicó su primer libro, titulado “El Cuaderno Crudo”, que trata la historia de una persona que en un momento de su vida se encuentra aislado en una habitación particular; y al que el encierro y la desesperación lo llevan a un estado de incertidumbre que excede su capacidad de comprensión del contexto en el que se halla. Sobre aquella experiencia, Bottaro señaló: “es una sensación única e inigualable ver que aquello que alguna vez imaginaste llega a verse impreso. Ese mar de ideas sueltas en la mente que terminan consiguiendo su forma en palabras concretas y que se trasladan al papel. El tiempo “neto” de redacción no fue muy extenso debo decir, pero es cierto que uno no escribe todo de corrido y el texto necesita su tiempo de reposo para después volver a tomarlo. La redacción fue en un estilo que a mí me sienta muy cómodo, simple y que lo disfruté mucho. Ahora estoy terminando otra novela, pero que fue de una forma de redacción más compleja que me está llevando un poco más del tiempo que deseaba”.
Sobre sus expectativas y sueños a futuro, Ignacio manifestó que “mi deseo es poder pasar a estar en piso más allá de los móviles y poco a poco lo estoy cumpliendo. Mi sueño es poder tener mi programa propio, elegir mi equipo de trabajo y generar un clima donde de gusto disfrutar del aire al hacer un programa que sea realmente bueno de ver. A eso aspiro y ojalá pronto lo pueda lograr. Las coberturas internacionales también son un sueño y también espero que puedan darse”.
Para terminar, dejó un mensaje a los alumnos de la Universidad: “el mensaje creo que es simple: persigan sus sueños y convicciones. El medio periodístico no es fácil, eso es un hecho y muchos pueden llegar a frustrarse. No todos los caminos son iguales y no todos tienen las mismas posibilidades. No voy a faltarles a la verdad en mis palabras. A algunas personas las posibilidades les aparecen más fácil y otros tuvimos que pasar por mucho para poder llegar hasta lo que soñábamos, pero lo importante es no compararse y no perderse en el foco que tiene que estar puesto en ustedes mismos. Confíen en sus capacidades y en esos momentos difíciles, recuerden que tienen algo porque luchar y seguir adelante. Ese sueño que ustedes tengan es el que deberán perseguir y eventualmente, todo llega. El graduado USAL tuvo un camino de aprendizaje muy fuerte en el plano teórico y eso te da una capacidad de análisis que considero superior y muy positiva. La pata práctica siempre va a complementarse con lo laboral. La mayoría de las situaciones del mundo periodístico las va a ir aprendiendo en el trabajo, pero siempre va a estar presente esos consejos que varios docentes han dado en la carrera”.
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