La USAL toma acción frente a su preocupación por los devastadores incendios en Corrientes

En las últimas semanas los incendios forestales en la provincia de Corrientes arrojaron imágenes desoladoras, dejando a campos y arboledas convertidos en cenizas, animales huyendo desesperadamente de los focos del fuego y bomberos y voluntarios trabajando sin descanso para apaciguar la desafortunada realidad.

La Universidad del Salvador, mediante su Campus “San Roque González de Santa Cruz”, ubicado en la localidad de Gobernador Virasoro, entró en acción rápidamente para colaborar en la recuperación de animales y campos afectados por el incendio. La USAL trabaja en conjunto con la Red de Veterinarios en Catástrofes y la Municipalidad de Virasoro en el rescate de animales.

La Ing. Agr. Belén Rossner, Directora de la carrera de Agronomía en la Sede de Gobernador Virasoro, Corrientes, fue entrevistada por “Radio X Pilar” para dialogar sobre los incendios forestales en la provincia. “Ninguno de nosotros está exento, todos estamos sufriendo esta situación. Hoy en día los focos están lejos de nuestro Campus “San Roque González de Santa Cruz”, pero aun así nos vemos afectados por lo que sucede en toda la Provincia”, manifestó Belén Rossner.

Además, señaló que “tanto los especialistas de Corrientes como de Virasoro y los integrantes del Consorcio del Manejo del Fuego señalan en sus estudios y relevamientos que más del 95% del foco de los incendios tiene origen en el ser humano. Ese manejo sin cuidado del fuego, de origen antrópico, se combinó con una situación climática que nos viene castigando desde el año pasado, que es la sequía, que comenzó el año pasado y se acrecentó este verano”.

Por su parte, la Directora de Agronomía destacó que “las condiciones climáticas han cambiado y hoy no es lo mismo que hace 15 años. Lo mismo pasa con la deforestación, ha crecido exponencialmente en los últimos años. Se deben revisar todos estos aspectos y trabajar para reducir el riesgo de los factores que producen los incendios forestales. Cada día que pasa hay más focos de incendio que no se pueden controlar”

A su vez, manifestó que “las medidas de adaptación al cambio climático y mitigación del cambio climático hay que empezar a implementarlas ya, debemos abarcar más áreas para no llegar a esas situaciones donde las forestaciones se encadenan y no se pueden controlar. No es una situación a la que estamos expuestos hoy, sino que es un problema que nos va a acompañar durante mucho tiempo si no se trabaja para prevenirlo”.

La USAL puso a disposición tanto su Clínica Veterinaria de Atención a Pequeños Animales como el Campus de la Sede Virasoro para la recuperación de fauna animal, afectada por los graves focos de incendio. Veterinarios tanto de Virasoro como de Santo Tomé prestaron sus servicios de manera voluntaria y reciben diariamente tanto animales silvestres como animales de producción, con distintos tipos de lesiones provocadas por el fuego. “Quiero destacar el enorme trabajo que hace la Red de Veterinarios en Catástrofe y los profesionales auto convocados, que hoy son más de 150 personas que trabajan en la atención y recuperación de los animales rescatados para darles los cuidados básicos y entregarlos a las Asociaciones encargadas de la reinserción de esos animales a su hábitat natural. Los estudiantes y profesionales han respondido con una seguridad y vocación enorme”, señaló Belén Rossner. 

Julián Ascue y Adriana López son dos de tantos veterinarios voluntarios que parten su tiempo, entre sus veterinarias particulares o enseñar en la Universidad y atender a los animales víctimas del fuego que no dejan de llegar a las veterinarias o a la Clínica de nuestra Universidad, lugar donde se concentró la atención y el trabajo de voluntarios. “Es muy grave lo que está pasando con la fauna silvestre de la provincia y con los animales, que se vieron acorralados con el fuego. Muchos lamentablemente murieron, y otros se ven sin salida por el incendio. Los animales fueron distribuidos en los respectivos centros de veterinarios para ser observados y curados. Los más perjudicados fueron los caballos, las vacas y las ovejas, que son los que más acorralados por el fuego quedaron”, explicó Julián Ascue.

Adriána López, por su parte, destacó que “hace meses se viene trabajando para erradicar los focos de incendio en la provincia. Venimos desde diciembre recibiendo animales, a los que le damos las primeras atenciones, los estabilizamos, curamos sus heridas y les otorgamos antibióticos y medicamentos. Luego, trabajamos en conjunto con el Centro de Atención Aguará, donde su personal es el encargado de concretar la reinserción de los animales en la naturaleza nuevamente. 
Estamos trabajando con varios colegas de la localidad para recorrer la zona y poder rescatar animales, además de todos los que recibimos que son encontrados por la gente de la zona”.

Actualmente en la Clínica están internados dos pacientes que tienen distinta gravedad: un coatí que tiene las patas quemadas, y un osito melero que fue atropellado cuando huía de una zona de incendios. Estos son dos claros ejemplos de lo que provocan los incendios en la naturaleza. “Este es un grave problema que estamos teniendo, porque la fauna silvestre está perdiendo hábitat natural producto de los incendios, y lógicamente salen a buscar alimentos o refugio y en el susto se cruzan en los caminos y rutas, y resultan atropellados”, afirmó López.

La Directora de Bromatología y Zoonosis municipal, Dra. Gabriela Wilcke, compartió una solicitud para las personas que vean animales heridos: “deben avisar al teléfono de bromatología (3756561611) para que posteriormente se los pueda rescatar y atenderlos en la Clínica de la Universidad”. 

Por su parte, el Campus “San Roque González de Santa Cruz” también presta sus instalaciones para colaborar en la lucha contra los focos de incendio. Luis Ezama, Director del Campus, manifestó que el portón de la Sede Virasoro queda abierto todos los días para aquellos que quieran ingresar a buscar más agua, ya que el Campus cuenta con un tanque de 5.000 litros de agua donde los voluntarios o bomberos pueden recargar sus equipos y continuar combatiendo el fuego. 

La situación es desesperante, ya que todos los días se combate cada foco nuevo de incendio que se propaga por toda la provincia.