Testimonio posintercambio de estudiante USAL
Javier Previgliano, estudiante USAL de Servicio Social de la Facultad de Ciencias Sociales. De septiembre a enero pasados, realicé un intercambio en la Universidad Complutense de Madrid. La experiencia fue un constante aprendizaje, desde lo personal, académico, relacional y cultural. Por todo esto y mucho más, siempre voy a recomendar que, si se tiene la posibilidad, se realice un viaje de este tipo.
Para mí, el viaje empezó mucho antes de llegar a la ciudad: preparación, organización con las materias de acá para no atrasarme, charlas con los asesores y la Dirección de Cooperación Internacional para orientarme, eternas búsquedas de universidades, becas y materias, etcétera.
Los primeros días en la Complu, como se la llama a la Universidad, fueron un poco difíciles, pero después, me acostumbré a su funcionamiento y ya estaba más cómodo. Aprendí mucho y lo que más rescato es haber tenido la posibilidad de cursar materias de otras carreras. Esto me permitió aprender desde la perspectiva de otras ciencias. También conocí mucha gente, me hice amigos de todas partes del mundo y me relacioné con varios profesores.
Coincidí con un amigo que se fue de intercambio a Madrid, así que vivimos juntos los seis meses. El hecho de estar con amigos, y también solo en otro país, fue enriquecedor, por todo lo que implica hacerse responsable de las tareas de la casa.
Puedo decir que la Universidad Complutense de Madrid se convirtió en mi segunda casa
- Inicie sesión para enviar comentarios